Fuego

Cuántas veces me he preguntado dónde estaba mi lugar de origen…

Y sentía la vida como un Arco Iris Infinito. Y sentía mi corazón como una ola inmensa de vitalidad. Y sentía todos los latidos de la tierra… Fue entonces cuando me proyecté y me encontré en un mundo denso. Estuve viviendo en guerras y olvidos, y durante años estuve recogiendo de entre las ruinas las cenizas de odio y lamentos que se elevaban hasta el mismísimo Centro del Cosmos…

Caminaba con piezas de plomo en los pies, me faltaba oxígeno para vivir. Cada respiración era como atravesar la estructura de un bloque de cemento…

Me refugié en las entrañas de la tierra sin olvidar las risas del eco de la vida. En ese momento me di cuenta de que había recuperado mi esencia,  el proceso de purificación estaba concluyendo y desperté…